¿Cómo implementar la movilidad sustentable en la UCV?

POSIBLES PROYECTOS:

Si bien es cierto que la universidad cuenta con accesos en transporte público y rutas de transporte gratuitos para los estudiantes, dentro y fuera de la universidad, se pueden hacer algunas mejoras a las actividades existentes y agregar nuevas propuestas.

Ruta Interna: En este aspecto se propone la mejora de dicho servicio puesto que a pesar que se cuenta con los vehículos disponibles para la circulación dentro de la universidad, no hay constancia en la prestación del servicio, más que todo por problemas de personal, entonces la propuesta seria asignar un personal fijo para dicha actividad y supervisar que el servicio se preste en un horario fijo.

Transporte público: Que se implante una ruta en el área metropolitana de Caracas para el traslado de los estudiantes, profesores y demás personas que deseen tener acceso a la universidad, sin tener la necesidad de trasladarse en sus vehículos.

Auto compartido: Es la práctica que consiste en que diversas personas compartan coche tanto para viajes periódicos como para trayectos puntuales. Con esta práctica se pretende reducir la congestión de tránsito, así como facilitar los desplazamientos a personas que no dispongan de coche propio. Además, supone una notable disminución de emisiones de CO2, al reducir el número de coches en las carreteras.

Tarifas de estacionamiento: Partiendo del anterior punto, este consiste en reducir el número de vehículos en las calles, a través de no cobrar las tarifas de estacionamiento cuando los carros contengan de 3 a 5 personas.

Bicicletas: Los estudiantes pueden tomar prestada una bicicleta sin costo alguno, para desplazarse dentro del campus. Esto supone adoptar espacios para el traslado y estacionamiento de dichas bicicletas en la UCV, además los estudiantes que tengan sus propias bicicletas puedan llegar a la universidad en ellas y cooperar más ampliamente con la sustentabilidad dentro y fuera del campus.

Plan de Seguridad e iluminación: Las ciudades más disfrutables tienen entornos peatonales maravillosos. Caminar es la forma más universal de  trasladarse y cuando el diseño de las calles prioriza las necesidades de los transeúntes, la salud, la actividad económica y la seguridad mejoran. Las calles transitables a pie son las piedras angulares de una ciudad sustentable, para esto hay que lograr que las personas se sientan seguros; en general, entre más transeúntes haya en las calles, más seguridad tendrán. Hacer “atractiva” a una calle implica que ésta albergue una diversidad de lugares y actividades: espacios públicos animados y comerciales, ayudando a crear zonas llenas de vida.